07 noviembre 2012







    Supongo que ya puedo hacerlo. Ahora que ya sé que no era otra de mis psicotrópicas y trasnochadas alucinaciones. Ahora,  ya transcurridas unas cuantas semanas desde la salida de su primer 7",  publicados 2 vídeos y tras un debut triunfal en los madriles teloneando ni más ni menos que a The Primitives y presenciando el nacimiendo de la  nueva formación de Papa Topo (fiesta histórica para el sello Elefant y el indie patrio en general). Ahora, tras verse sometidas a ese infame test de ¿Revelación o timo?, ahora ya podemos hacer la reseña de su primer 7" con calma y contibuyendo al continuo caos que es este blog en lo que a reseñas se refiere.

  Bufff... Bueno, a ver, por dónde empiezo... Creo que la hoja promocional de Elefant describe a la perfeción lo que es el grupo y el disco. Sobra nombrar a THE SHOP ASSISTANTS, MANBO TAXI  o TIGER TRAP, BLACK TAMBOURINE o TALULAH GOSH,  por eso me molestan bastante algunos comentarios y comparaciones con otro grupo femenino (al cual no pienso nombrar) que creo que no vienen más que a poner de manifiesto una vez más la escasa cultura musical del personal y el evidente oportunismo al utilizar siempre el nombre que se tiene más a mano o más fresco para tratar de comparar al grupo de turno... Por eso, y por primera vez en la historia de este blog, me pongo borde y chungo y les digo a quienes se sientan por aludidos que "no tenéis puta idea".

  

    "Eat Tacos" de Wild Balbina es una excelente carta de presentación para un grupo nobel que, bajo mi punto de vista, no está más que asomando la patita  de lo que tenga que venir después de haber firmado canciones como "Spit Your Love", "So Kind" o la propia "Eat Tacos". En estas primeras canciones ya demuestran un talento y frescura muy superior a la media de grupos en muchos aspectos. Tal vez lo más destacable para mí sea el perfecto tándem vocal que forman Marta y Antía y que sin duda alguna hacen sobresalientes las armonías vocales y conforman uno de los ragos mas característicos del grupo, para además transportarnos una y otra vez al mundo de los conjuntos vocales de chicas de los años 60 que tanto nos gustan. Si además sumamos el excelente trabajo que, desde el más absoluto amateurismo, realiza Zapata a la batería junto a sus aportaciones vocales y algunos aspectos acertados de la producción de Manu Sanz., éste es un disco sencillamente BUENO, necesario y que sus fans esperábamos ansionamente.


   IJ







0 comentarios: